Hoy una persona que ha cobrado cierta relevancia en mi vida (no se que tanta relevancia en realidad, pero si que está presente más que cualquier otra persona), me pidió casi desesperadamente que confiara en él, diciéndome que no me mentía, que no pensaba hacerlo y que si quería lo interrogara como a un delicuente y él me diría la pura y santa poco menos que con una mano en la biblia y la otra en el corazón.
Más tarde conversabamos acerca de otra cosa, en la que salió a relucir nuevamente el tema de la confianza y me dijo:
"mi abuelo me decía que no confiara ni en mis dientes, por que en cualquier momento te pueden morder la lengua"
Estaba muy convencido de lo acertado de su dicho... ¿Por la boca muere el pez? Me pide confianza y me dice que no confíe en nadie. Ok! Mi vida sigue con las incoherencias. Por lo menos no fue el único que me dijo que no confiara en nadie. Que tení que dajr atrás esa carita de niña buena, esa actitud cordial con todo el mundo, por que si doy la mano, me van a tomar hasta el... codo. Supongo que tienen razón.
¿Creer o no creer? ¿Confiar o no confiar?
4 Palabras Tuyas:
Saludos!!
Uf, qué complicado...
Es que es bueno y necesario confiar... pero en las personas correctas. Es perjudicial para la salud (mental y del corazón) entregar aunque sea un poco de confianza a alguien que no se la merece. Al menos así lo he vivido yo: perdí la cuenta de la cantidad de veces que me equivoqué con las confianzas.
Mi querida señorita, creo que usted y yo entendemos que las incoherencias son normales en todos y que es bueno tener diferencias con la gente, pero a veces para que ciertos lazos afectivos se den debe haber un conjunto de coherencias intransables... hay temas en los que no puede haber incoherencias. Y, junto con la coherencia debe haber compatibilidad de coherencias: ciertas coherencias (que llamo principios y valores) deben ser iguales entre todas las personas que quieran crear ese lazo.
Señorita, si ha encontrado alguna incompatibilidad mínima entre las coherencias, le recomiendo encarecidamente no creer y alejarse: cuando los edificios caen, los escombros se reparten a su alrededor... en el mejor caso, no se puede ver bien por el polvo, pero al final igual se encuentran un montón de escombros inservibles.
Reciba un afectuoso saludo de mi parte, y un agradecido abrazo por su visita a mi humilde blog. Se le extrañaba.
Gracias por tu visita a mi espacio, se extraña mantener la comunicación fluída, pero así son las vacaciones...
Sobre tu tema, yo creo que hay que escuchar al corazón, es increíble que te avisa cuando estás en peligro; a veces uno no cree en sus intuiciones, pero si les prestara atención más seguido nos evitaríamos muchos problemas. Tenemos que aprender a utilizar las antenitas como los insectos, mira que anda mucho depredador suelto.
Me entristece que pasaras por eso, pero si te fijas bien tus antenas están funcionando a la perfección, no te convenció con su predicamento, eso demuestra madurez de tu parte.
Persevera...
.:*Cariñossss, abrazos y gracias por tus bellas palabras*:.
pucha.. yo cuenfioe mucho en una persona y me decepciono de uan forma que nunca pense... es mejor no confiar ni en la sombra... bueno al menos esa es mi manerda de ver las cosas...
saludos y gracias por tus consejos.. a veces es mejor vivir el presente namassss.. pero creeme ke es inevitable pensar en el futuro y el pasado
chaux
Hola Lucybellita. Yo pienso que la confianza es una relación bilateral, que va dándose de a poco. Siempre es necesario que alguien dé el primer paso, pero no tiene para qué ser un salto mortal. Tal vez demostrar un poco de confianza al principio, para ir probando el terreno no estaría mal. Así, si te resulta, vas confiando un poco más y así. Si no resulta con esa persona, simplemente no confíes más en ella.
No podemos generalizar diciendo no confíes en nadie. Aunque sí hay asuntos delicados para mí, como recomendar a alguien para un trabajo, prestar plata, el auto o la casa, donde se requiere una confianza a toda prueba.
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